Dulce Hernández

Razones por las que NO DEBES compartir tus cosméticos

En ocasiones, por alguna razón llegamos a olvidar nuestra paleta de sombras, nuestro labial, gloss, rubor, etc. etc. o le ha llegado a pasar a nuestra mejor amiga o hermana y el error que llegamos a cometer es prestar o pedir prestado para darle ese toque final a nuestro maquillaje. ¿Sabes que no es tan insignificante como parece hacer esto?

En ocasiones, tal vez lo has hecho, pero debes saber que los dermatólogos aseguran que este intercambio aparentemente inofensivo representa un riesgo: compartir cosméticos puede ser vehículo de transmisión para bacterias, gérmenes y hasta virus y esto puede detonar algún tipo de irritación o granitos (tipo barros o espinillas por cumulo de grasa), derivado de este intercambio entre las diferentes pieles.

Es por ello que, si vas a pedir prestado algún producto de maquillaje lo uses con tus propias brochas o si compartes tus utensilios, debes ser más riguroso en el proceso y espacio entre una limpieza y la otra, así podrás reducir el riesgo de alguna alteración en tu piel por esta actividad. Pero ante todo, piénsalo 2 veces para evitar dañar la apariencia de tu piel.

Hay una cosa que no debes olvidar nunca: El maquillaje debe ser de uso personal y único, resulta ser tan íntimo y delicado debido al contacto que tiene en zonas del rostro sensibles a transmitir diversos tipos de enfermedades.

Creo que una de las reglas inquebrantables de todas las mujeres debería ser NUNCA PRESTAR NUESTRO MAQUILLAJE. ¿Quieres saber las razones de no hacerlo?

1. Las brochas de maquillaje y los pinceles son transmisores de gérmenes

Debes tener especial cuidado con las brochas y aplicadores en general pues es la principal mina de suciedad cuando de maquillaje se trata. Los instrumentos que utilizamos para aplicar el maquillaje pueden fácilmente transmitir las bacterias de un individuo a otro si estos son utilizados por más de una persona. Las esponjas y brochas acumulan miles de bacterias y polvo, además de mucho maquillaje que no sabes si esta vencido.

Por ello, es super importante lavar las brochas y aplicadores frecuentemente con jabón para desinfectarlos de posibles agentes contaminantes para proteger el rostro.

2. Puedes sufrir de acné repentino o herpes labial

Al compartir tus productos de maquillaje te expones a contraer infecciones, como por ejemplo la conjuntivitis o infecciones. La aparición repentina de acné en el rostro, al igual que el herpes labial son una de las consecuencias de compartir estos productos.

3. Reacciones alérgicas en la piel

Recuerda que todos tenemos organismos diferentes y tal vez la base de maquillaje que le deja a tu amiga una piel de porcelana puede que tu termines con una reacción alérgica. ¡Mucho ojo con pedir prestado!

Ten en cuenta que no todos los productos están elaborados para el mismo tipo de piel. Cada una tiene un pH distinto y unas son más delicadas que otras, así que al usar maquillaje ajeno aumentas el riesgo de padecer reacciones alérgicas.

4. No uses cosméticos vencidos

Sé que en ocasiones para las mujeres deshacernos de nuestros productos de maquillaje favoritos es un poco doloroso. Pero imagínate si pides prestado algún labial, seguro no sabrás si ya tiene siglos con esa chica o tiene poco y eso podría también llegarte a causar alergias en la piel.

5. Las infecciones se quedan en el maquillaje

Otro factor que debes tener en cuenta es que si sufriste recientemente de infección en los ojos, herpes oral o acné lo más recomendable es deshacerte del maquillaje que usaste durante el padecimiento, porque muy probablemente pueda almacenar rastros del virus que lo convertirán en una situación recurrente en tu rostro.

6. No extraigas con los dedos las cremas faciales

Este tipo de cosméticos deben ser manipulados con las manos limpias y tal vez ya tengas este habito, pero cuando compartes alguna crema, no sabes si la otra persona tendrá el mismo cuidado. Los artículos de aseo personal, como su nombre lo dice, son para ser usados por una misma persona hasta terminarlos.

Si te encuentras en una situación en la que te ves obligada a prestar tus cosméticos, considera compartir sólo los siguientes: bases líquidas que por su mismo estado es muy difícil que se transmitan gérmenes; al igual que el rubor y polvo compacto. Puedes compartir tu base o rubor siempre y cuando cada quien tenga su propio aplicador, ya que allí es donde realmente habitan los gérmenes.

Pero, los productos que por ninguna circunstancia son:

Bálsamo, brillo y lápiz labial. Estos son los productos de maquillaje más compartido de todos y uno de los más peligrosos. Éstos cosméticos no deben compartirse bajo ninguna circunstancia, ya que pueden transmitir virus como el herpes labial, que puede no ser notorio en la persona que comparte, ya que este virus aunque no manifieste las clásicas erupciones en los labios, permanece con las personas durante toda su vida.

Máscara para pestañas, sombra y delineador para ojos. Compartir alguno de estos cosméticos, representa un riesgo mayor que con otros, ya que se pueden transmitir bacterias o virus causantes de conjuntitivis.

Los ojos son super delicados y debes tener mucho cuidado con lo que colocas cerca de ellos, constantemente están expuestos a muchas bacterias que pueden infectarlos, una de las más comunes es la conjuntivitis. Las pestañas trabajan como barrera protectora frente a todas las bacterias, pero imagínate si vas a usar una máscara infectada por alguien más.

¿Qué te han parecido estas razones/consecuencias por la cuales prestar tu maquillaje o pedir prestado no es una buena idea? ¿Verdad que ahora si la pensarás dos veces antes de hacerlo? Así que aunque sea tu hermana, mamá, hija, etc. la que te pide prestada tu labial, sombras o mascara de pestañas mejor opta por decirle donde lo compraste, quizá pases por antipática pero es mejor decir NO a terminar con una desagradable infección. ¿No lo crees?

Y como consejo final te sugiero que cuando tengas una sesión de maquillaje en algún salón de belleza o vaya un maquillador a maquillarte a tu casa siempre exige que los aplicadores estén desinfectados y asegúrate que el cepillo de la máscara de pestañas sea desechable. El maquillador debe tener las manos muy limpias y, antes de iniciar, hazle saber si eres alérgica a algún producto o marca específica.